miércoles, 30 de junio de 2010

La vida del espejo

Esta vida es loca. Realmente cada día vemos y conocemos cosas diferentes, cosas que no sabíamos existían. Ironía es el apellido de la vida misma. Nadie puede explicar las locuras en las cuales nos vemos inmersos y lo locos que nos volvemos nosotros mismos al tratar de descifrar lo que la vida se esconde debajo de la manga. A pesar de todo, la vida es la percepción que cada uno tiene de acuerdo a las vivencias y experiencias. ¿El destino está escrito o uno lo crea? ¿Las cosas de la vida pasan por que tienen que pasar o son simplemente los diferentes caminos que uno escoge? Estas preguntas son inevitables en la vida de todo ser humano y esto por esa curiosidad de saber y conocer el qué pensar. Sea cual sea la razón o respuesta, la vida es loca y en ella confluyen múltiples factores que la hacen cada vez más dinámica e intangible. Ahora, muchas personas consideran que uno hace la vida que quiere, mientras hay otras personas que dicen que la vida es la que lo hace a uno. Por qué no fusionar los dos conceptos y llegar a concluir que son términos interdependientes, que trabajan de la mano el uno con el otro hasta que se llegue amalgamarse de tal manera que no encontremos confusiones.

Dar lo mejor de nosotros en todo lo que hacemos, eso es lo importante. Las nuevas experiencias y errores nos hacen estar más atentos y preparados para evitar futuras fallas. El pensar en de manera de contingencias y superación, hace que dentro de esa vida loca (como la hemos estado llamando) podamos tener liderazgo y algún tipo de control sobre la influencia en la construcción de nuestro propio futuro. El ser firmes en nuestros ideales nos ayuda a que todas las nuevas tendencias y locuras que trae la vida no nos afecten del todo, si no que podamos identificar esas nuevas cosas, extraer lo bueno y lo que nos funciona e ir adoptando una dinámica personal.

La vida es loca y a lo mejor, todos actuamos como locos, como perdidos en tiempo y
espacio. Tratemos de sacar provecho de todo, con las ansías del aprendizaje y crecimiento personal y profesional. La otra figura del espejo es la que nos “traerá de vuelta a la tierra” y nos recordará siempre nuestros sueños y anhelos, ella es la que nunca estará loca, al menos que nosotros nos consideremos atrapados por el mundo de afuera.

domingo, 27 de junio de 2010

Solo para áquel...

Para aquel a quien me amaba sin siquiera saber mi nombre, para aquel que se preocupaba por mi sin siquiera haberme visto a los ojos, únicamente para aquel que ve en mí lo que nadie ve; sólo para él.

Siempre hay alguien en tu vida en quien te inspiras, una persona que logras llegar a conocer a profundidad y que piensas es igual que tú. Esa persona que te da los mejores consejos que nadie te pueda dar, esa persona que quiere lo mejor para ti y que lucha por hacerte feliz. Esa persona que calla sus más íntimos sentimientos, esa persona que muchas veces actúa de la manera incorrecta porque se frustra no poder verte hacer el bien, siempre hay alguien en tu vida que daría todo por ti. Mientras duermes sueña contigo, cuando se levanta piensa en ti y cuando te abraza sientes que siempre cuida de ti.

Es por eso que esa persona merece todo y ha experimentado todo lo que eres, todo lo que puedes dar y todo lo que no puedes dar. Él conoce tu cariño y conoce tus amores, conoce tus caprichos y conoce tus errores, conoce tus gustos y conoce tus temores, conoce tus triunfos y tus conoce tus secretos, él te conoce y vive tus razones.
Para aquel a quien extraño cuando está a mi lado, para aquel a quien amo sin siquiera expresarlo, para aquel que me mira, para aquel quien abrazo, para aquel que me enseña cada día un nuevo paso, para aquel quien confía que soy yo su milagro, únicamente para aquel por quien moriría y por quién viviría, sólo para él.

sábado, 5 de junio de 2010

La Siguiente Estación...




Todo se trata de un reflejo, un mundo lleno de segundos que se van y de respiros que no podemos volver a dar. A veces pareciera que estamos saltando en un trampolín y de un pronto a otro, estamos en el aire y parece que no volvemos, nos quedamos ahí en medio de la nada, con nuestros pies flotando, sin que vuelvan a tocar nuevamente la cama elástica. Nos asustamos y empezamos a patalear en el aire, creemos que vamos a caer de un solo golpe, pero realmente caemos en un trampolín más alto. Nuevamente nos sentimos estables. Nos sentimos diferentes, avanzamos pero no podemos devolvernos. Así es nuestra vida. A veces pegamos nuestro mejor salto a una nueva etapa, a nuevas cosas, a estar en un nuevo tiempo y espacio. Muchas veces pasa inconscientemente, simplemente tenía que pasar. No podemos escoger nuestro futuro, pero sí estar siempre abiertos a nuevas experiencias. Cuando estamos cómodos, quisiéramos quedarnos así, pero siempre tenemos la posibilidad de estar aún más cómodos, aunque no lo veamos o pretendamos. Todo fuera por la conveniencia de la tranquilidad y la confianza de la estabilidad. Nuestra vida está llena de puertas que se abren y se cierran, dando camino a otras. Nuestra vida está llena de trampolines y respiros que son la transición más tangible de todas hacia una nueva etapa, por eso el estar preparados para ella es lo que tenemos que tratar de manejar.

Dejar atrás el presente para ver con ojos cerrados el aferrarnos al futuro incierto no es siempre una tarea fácil. Lo único que no evoluciona es la otra figura del espejo, aquella sombra que hemos visto por años, la que va siempre más adelante que nosotros, pero no avanza hasta que no la alcancemos. Aprovechemos cada salto, cada respiro porque en un segundo puede que sea el último que demos.

martes, 25 de mayo de 2010

Simplemente no se sabe que....

A veces no se sabe qué hacer. A veces no se sabe cómo actuar. Esa incertidumbre, duda y un “no se” parecieran ser las únicas respuestas al cómo nos sentimos. En esos momentos no existe nada más que el estar sin estar seguro de lo que se quiere, y nada más nos queda esperar. La inseguridad se fusiona con la inquietud, y la impaciencia con el nerviosismo. Es un sentimiento que parece durar horas, en donde el tiempo se lentifica y la tensión se acelera. No sabemos cómo escaparnos de semejante incomodidad, y como el mundo no se detiene cuando lo queremos, solo nos queda aguantar y respirar profundo para tratar de no desvanecernos. Es increíble cómo la manera en que nos sentimos, se refleja directamente con nuestro cuerpo físico. No podemos dejar de pensar en ello y nos sentimos cada vez más cautivados por ese sentimiento, tenemos que desahogarnos con algo. Queremos gritar, caminar y caminar, pero extrañamente lo que más queremos en dormir. Dormir porque ese sentimiento debilita nuestras energías, nos hace sentirnos cansados, las partículas de oxígeno pesan sobre nosotros y pareciéramos estar bajo el dominio de alguna droga. Puede que sea mental, puede que nos sintamos que no pertenecemos más a este mundo, puede que sea un juego, puede que seamos nosotros mismos, puede que sea fantasía, puede que sea un sueño, puede que no sea nada o puede que sea más de lo que creamos, la verdad, puede que sea lo que queramos que sea. Pero lo único de lo que estamos seguros es de que el pensar más y más, hace que nos desubiquemos rápidamente.

De un momento a otro, nos sentimos encasillados por nuestro temor, hasta que logramos neutralizar lo que pasa a nuestro alrededor, nuestras facciones son casi nulas o a lo mejor, nos vemos tan normales y quietos que nadie se da cuenta de la odisea que está pasando dentro de nosotros. No podemos seguir así por siempre, pero en estos momentos la solución no se encuentra fácil, tenemos que hacernos creer que todo es normal y que podemos volver de ese estado de limbo. No queda más. A veces no se sabe qué hacer.

martes, 4 de mayo de 2010

Ver Para Creer....

Muchas veces no nos damos cuenta de lo capaces que podemos ser en el desarrollo de muchas cosas. Es por ello que nos limitamos a lo que sabemos hacer y no arriesgamos aquello de lo que no tenemos certeza podemos realizar. Esa otra figura en el espejo es el vivo reflejo de creer en lo que cada uno tiene para dar y en lograr aventurarnos en nuevos mundos. Nuestro interior siempre tendrá la solución. Es siempre importante el mantenernos totalmente susceptibles a cosas nuevas, estar abiertos a nuevas tendencias y a distintas maneras de ver las situaciones. Esto, porque de una u otra manera, podemos tener alguna influencia y relación con nuevas experiencias y aprendizajes.

Nuestra capacidad de cambio personal y de hacer cambiar otras cosas es impresionante, constituyendo que los primeros impresionados siempre somos nosotros mismos. La gente nunca deja de soñar, pero siempre deja de lado el hacer realidad esas convicciones. Ese no es el sentido de tener sueños. Realmente tenemos que dar lo mejor de nosotros mimos, y creámoslo o no, siempre vamos a poder dar más. Siempre vamos a pensar que pudimos haber dado más de nuestra capacidad; así es como combatimos el conformismo de cada día. Las aventuras en las cuales nos podemos adentrar, si arriesgamos, son mucho más fáciles de alcanzar de lo que imaginamos.

Vale la pena el atrevernos y poner a prueba todo lo que somos capaces de hacer. Los retos nos mantendrán vivos, las experiencias construirán nuevas metas y veremos siempre a la otra figura del espejo con una sonrisa en el rostro.

jueves, 29 de abril de 2010

Los reflejos del espejo

Muchos dicen que uno debería de tener un espacio para poder compartir con uno mismo, salirse de la rutina y aprovechar del tiempo libre para estar en un ambiente tranquilo el cual nos permita pensar más claramente. En algunas de esas ocasiones empezamos a recordarnos de hechos o situaciones pasadas de nuestra vida que parecieron haberse olvidado ya por mucho tiempo y nos retornan a veces en un momento no tan indicado. Es entonces cuando ya habíamos superado algunas circunstancias que repentinamente aparecen nuevamente como recuerdos. Esto lo podríamos ver de dos enfoques. Uno, cuando lo que se nos vino a la mente es algo que nos había marcado de alguna manera y siempre va a estar presente, pero lo vamos a recordar como algo ya pasado que a lo mejor en ese momento nos causó tristeza, enojo o felicidad, pero que ahora ese sentimiento ya no lo experimentamos de la misma manera. Pero también existen todos aquellos recuerdos los cuales no hemos podido olvidar del todo, y más bien siguen influyendo de una manera indirecta en nuestros pensamientos haciendo que no los logremos superar de alguna forma.

Ahora, ¿qué tanto afecta en nuestra actitud ese segundo enfoque del cual estamos hablando? La realidad es que aunque sea un hecho del pasado se revive en nosotros cada vez que se nos viene a la mente. Más allá de eso, puede hasta llegar a cambiar nuestro humor en ese momento, es como un tipo de sensación la cual nos expresa que no nos hemos desligado aún por completo de algún hecho de hace vario tiempo. La importancia de esto es que nos permite empezar a ver las causas que nos explican y permiten realizar una introspección de lo que pasa con nosotros mismos. Podemos hasta identificar la razón que ha hecho que aquel recuerdo influya en nosotros y así poder irlo controlando de alguna manera. Tenemos entonces que aprender cómo logramos ir manejando y aprendiendo más acerca de las cosas que nos afectan y las que influyen de alguna manera en nosotros mimos. Los recuerdos son algo natural y formarán siempre parte de nuestro proceso de vida y aprendizaje, permitiéndonos validar cómo nos hemos desarrollando en el transcurso de nuestras experiencias.

lunes, 5 de abril de 2010

El lugar donde vive algo más que una voz




Hay una vocecita siempre dentro de nosotros que muchas veces se dice nos ayuda a decidirnos por las cosas que son realmente correctas. En ocasiones, nos parece que es alguien totalmente externo a nosotros, porque tal vez lo que “escuchamos de adentro” sea diferente a como nos estemos sintiendo o difícil de entender. Hay momentos en los cuales se convierte en el impulso que necesitamos, los ánimos para seguir adelante, en aquella fuerza interior que nos recuerda lo que queremos y somos capaces de hacer. Pareciera entonces ser alguien que nos conoce mucho, que sabe de nuestras fortalezas pero también sabe de nuestros miedos y debilidades, que sabe nuestro secretos y que habla con nuestra mente. Muchas veces no logramos escucharla con facilidad, porque pareciera habla muy bajo, siempre está tranquila, segura de lo que dice y si no logramos estar callados en nuestro interior tratando de ver qué pasa dentro de nosotros, no la podemos oír. Es nuestra amiga, nuestra confidente, la que casi siempre tiene la razón y sabe qué hacer en los momentos confusos; pero es a quien muchas veces no le hacemos caso. Por eso, a lo mejor, después de haber cometido un error o habernos equivocado en algo, nos decimos “yo lo sabía” o lo presentíamos quizás.

Está tan cerca, aunque muchas veces la sentimos tan lejos, está presente cada segundo aunque a veces la extrañamos y hasta nos olvidemos de ella. Aparte de toda esta caracterización, pareciera que esta vocecita tiene algo más que solo voz, pareciera ser que es realmente alguien, que tiene personalidad, tiene mucha confianza, no necesita a nadie, es siempre positiva, cautelosa, está alerta a todo, piensa las cosas más de una vez y nunca nos deja solos. Es alguien que está allí siempre, totalmente intangible, sin género alguno, no tiene nombre ni edad, pero sabemos en donde vive. Muchos piensan que es la llamada conciencia, otros la vocecita del bien, yo le llamo la voz de la figura del otro lado del espejo.